Acerca de la poética de Luis Pereira Severo

Luis Pereira Severo: La ternura del despojo

Por Gonzalo Fonseca

Hay en Pereira una poesía de la experiencia. A veces confesional, otras contemplativa, se detiene, referencial, en las vecindades y en las estancias vacías de tiempos peliagudos. De esa ilegalidad estacional devino construcción de hermandades múltiples: sujeto activo de las convulsiones políticas donde a los desagraviados había que buscarlos con espejos y lo imposible producía la sumisión en la irrealidad. Y ahí, en la resistencia, acciones poéticas colectivas. Como muestra: en solemne acto almorzarse al poeta de la patria en el Parque Hotel, en Sayago para no morder el polvo, con los Fabla, activismo social artístico. Pero antes de ser ese poeta isabelino expulsado hacia la costa supo ser cronista deportivo del semanario La Idea, cronista de cancha de inferiores y baby fútbol para CX 158 Radio Paso de los Toros y conductor de Tropicalísimo en la misma radio. Dentro de su prontuario debería figurar que fue secretario de redacción del semanario pro moscovita Liberación (suplemento del diario bolchevique La Hora); Directivo del CAUI, (Club Atlético Universitario Industrial, de la Escuela Industrial de Paso de los Toros) y de la Iglesia Metodista de la Aguada, Montevideo; que estudió periodismo con Leonel Tuana y Héctor López Reboledo; que realizó cursos de líderes en la Asociación Cristiana de Jóvenes y nadie maliciaría que alguien tan circunspecto hizo expresión corporal en AEBU, teatro con Alberto Restuccia e Iván Solarich de los que resultó su elegancia y graciosa figura. Anduvo por el Mar Negro cuando existía la URSS, se hizo periodista, fue redactor de Estediario, corresponsal en Maldonado de BRECHA y editó poesía en abundancia. También fue el responsable de ciclos literarios como Cultura de Miércoles, en el Montevideo de los 90’ o Jodido Jueves, en el Maldonado de los 2000 y pico. Gestor cultural, director municipal y tocador de tambores en una comparsa. Y es, cómo no, el number one de la editorial civiles iletrados, que lleva, indisputablemente, un (su) sello distintivo.

Su poética se remonta a 1980, donde arriesga imprimir abreviadamente la palabra compañeros en su libro inaugural “Murallas”: a los cros. de / experiencia III / y IV / cuando toda la maquinaria del miedo estaba en pleno funcionamiento. Sugerir “compañeros” en esa época donde por momentos (muchísimos, casi todos) lo dominante era el páramo, toda inspiración podía ser liquidada dichosamente y enterrada sin ser admitida. Entre hondonadas surge un lenguaje que comienza a ser elaborado con pobreza espartana consciente, la palabra ocupa dimensiones precisas: cajas de resonancia efectivas como signo ante la angustia de esas murallas reales. Ante la pomposidad militar, un retorno a la humildad en la escasez de recursos como instrumento intencional. 

Antes los poetas eran buenos / escribían al alba / sobre Ia vida / orinaban / escrupulosamente ocultos / comulgaban / beatíficamente los domingos. // Ahora invocan con urgencia un lápiz / esgrimen Ia derrota por los poros / son sucios y arrugados / sus poemas.

Pero entre esos tabiques de encierro y resignación ya se entrevé en la pastoral de Pereira el encanto por lo femenino, que, de ahí en más, será una constante. La mirada de ese montevideano adoptivo, veinteañero, marcada por el humo de perros agonizantes y el carraspeo enfermo de los ómnibus, traduce el nacimiento de los días / desde cero / con una almohada en el grito / y ángeles en fuga / y mujeres rojas de cansancio, pese a todos los pesares

Los dominios de las angustias y las reprimendas están presentes, luego caerá Berlín y  renacerán los amores torrenciales: / mujeres como inviernos / o mujeres / como primavera. Señales con ilustraciones de bares sureños, ambientes reminiscentes, pequeñas historias sin altavoces y el abrazo de mujer, como alarido. Ante la parca, la solidaridad constante, el derecho al amor compartido con los desheredados de la tierra y en esa coexistencia el amanecer rompiendo olas // aunque la humanidad se venga encima. Lo anteriormente no dicho por imperativo gubernamental se hace explícito en una catarsis de nombres, siglas, partidos en manuales paródicos, en contraseñas de la memoria trasvasando las crueldades, que, como bien señaló Alfredo Fressia en su momento, sirven “más bien para señalar y ordenar un mundo de seres y objetos olvidados por la sociedad de consumo”. Evocaciones de los mares esteños conviven con parroquias y mujeres de múltiples nombres que, tajantemente, se corporizan en fotos en blanco y negro, vitrolas, gramófonos, banderas, recortes de diarios, sábanas de pensiones con la sombra de Onetti planeando zaguanes de un sutil azul parcamente sugerido y los trenes que partían para montevideo. Fascinado ante pantallas proyectoras de imágenes llenas de color al ritmo de distintas melodías va abandonando un gris de época para hacerse más fuerte la relación imagen – música – grafía, la luz y su proyección en los sonidos y su combinación armónica, aerosoles naranjas // tu voz en / el contestador automático. // aún no tengo video / no he leído a BalzacPoemas de acción de un omnívoro sin límites en su perseverante vampirizar aljófares del cine, la pintura, la performance, el cómic, la moda, la radiodifusión, uniendo las experimentaciones con lo digital y lo mundano, ahora tocan otra música / matan palestinos ahora // ¿es que no tienes al menos un boleto de avión? / ¿no podrías enviarle un fax? (también matan judíos bebé) / ¿no habrá al menos un clip / que trate de la inmortalidad? poemas que extrañan, admiran y persiguen la lengua original y la rompiente mientras las fm me aturden // las fm trituran mi cabeza / la diosa de pepsi me excita // las fm están programadas

Como en un caos ilusorio Pereira ronda sin hacerse el distraído por la realidad que le ha tocado vivir, asume culpas del pasado, carga con nobleza sus sueños cuarteados sin abdicar de creencias muy lejos del panfleto pero sí con profusión reivindicatoria de los habitantes del olvido, pasajeros de la nada, para citar a uno de los Fabla. O Como dice otro compinche (ERB) “El mundo que describe es siempre austero, la solidaridad con los “pobres del mundo”, una constante. Una pobreza conmovedora y una ausencia de cualquier riqueza, ostentación y a veces pareciera que hasta desprovista de cualquier necesidad material”.

Óyeme / no tengo dinero siquiera una tarjeta de crédito / (pero es imprescindible que pase la noche contigo / déjame mostrarte mi / silueta / de antiguo estalinista). // Jamás vayas a la cama con un poeta // no te convengo nena / oye / ¿no has aprendido a adeudar / cinco meses de alquiler?

La ironía, el aticismo pacen junto al descriptivismo: Ella cuelga en casa la foto del / nueve de defensor sporting / ¡santo dios, / huyamos a alguna parte! // ella se acuesta con el hombre que fue su amante veinte años atrás / ¿alguna chance para mí? /// hospitales siquiátricos públicos / yerba mate, mate cocido, corvinas / yerba mate, mate cocido, cuareim / yerba mate, mate cocido, la onda / yerba mate, mate cocido, parrillas / yerba mate, mate cocido, y puentes.

intento seducir poetisas / es más sano que ser gendarme o profesor / seducirlas y que / me escriban poemas y así / pasar a la inmortalidad. /// la granizada sobre las chapas / el chaperío el kennedy el barrio la / humedá / el caserío cartón piedra la / chapa de perdedor / los que nunca, fueron, propietarios /ni de la palabra / propietarios.

Contra el origen agonal y aristocrático de la areté, la meritocracia antigua, podemos anteponer la perduración de la obra del poeta como resultante de la ética y estética que trasciende la mera interiorización del mérito y del merecimiento. 

Tal como dice Fernando Cabrera acerca de la obra poética de Pereira, “en ella se aprecia una permanente llaneza y enigma al mismo tiempo, tanto en los temas como en lo formal o estilístico. Que esas dos cosas vayan juntas creo que es el mayor logro de cualquier manifestación artística”. Como un contemporáneo Hölderlin, Pereira alcanza su madurez creativa desprendido de toda constricción formal.

SZYMBORSKA PARRA MARGARIT
Paladas de tierra arena escombros bosques
minerales
Capas y capas de
vegetación
Es lo que queda
El sonido del verso de
Ajmatova
Alumbramientos
"Agradezco haber estado ahí en el 17".
"Conocerte fue una maravilla".
"Fuimos felices en el 83".
Capas y capas de escritura
Tabernas
Calles intrincadas
Quebradizas
Riachos
Afluentes de riachos
Cuencas
El poema de Circe
Agradecer

¿LA POBREZA es algo que se pueda narrar? ¿La fritanga con grasa de vaca la fariña el querosén la lámpara a querosén la chapa? 
Piedras en las chapas destartales piedrerío canales por donde la lluvia canaletas gotas ruidosas el chocar de lo goteo 
Se narra así mojado los colchones la gotera cama turca lo gris de lo frazada hospital municipal se narra sin nombre sin futuro se narra la sequía borrachera lo perdido los ajuares

Hay además portones y trancas y fideos y perros y jaurías y fiambreras y agujeros botines usados charque ropa usada en general 

No hay fotografías ni Bach ni Beethoven  ni sinfónica ni globos de aniversario ni pascuas navidades solo circo música bailable la lista de los hits que pasan por la radio 

¿Se narra así la fabriquera la peorcita la sin nicho se narra la jerga la payada la décima la polca se narra? ¿como es lo de tirar el anzuelo las carnadas el oficio de carnada apetitosa para el buche? 
También botes y ríos que buclean boquerones zanjas yuyerio el desorden de los yuyos en general y otra vez botes vadear la correntada.

LA MARCA DEL CASTELLANO POLUÍDO
La raspa de lo hablado 
Raspaje 
La melanye 
El Paraná la Pampa Paysandú
Osobuco zaino la baguala
El lenguaje de la fonda la herrería lo manya los vagones 
Conjugar la franja 
tricolores
Rampla
¿Lo que raspa el medio campo? 
¿Los defensas? 
Lo que raspa es el lenguaje 
Marcadores
Las tiras del asado en la parrilla

(ejercicio / arte poética) 

SE LE OCURRE 
algo muy gráfico
«Llueve sobre el camposanto»
¿Poesía civil como Raimondi?
Cuaderno viajero, es el nombre de 
Eso que escribe
El corte del verso determinado por la pantalla del Nokia
finlandés.
¿Se oye la lluvia desde el tercer piso? ¿Cómo desde Emilia Grassi, las barreras? ¿Pasa con retraso el motocar de las cinco?
Es gráfica la expresión
«llueve sobre el campo santo» 
¿Un tipo de santuario la 
Poética?
El corte del verso determinado por lecturas de Levertov.
Lo que respira en la superficie
El goteo primoroso sin
apresuramiento
sobre el campo
santo

EL OBJETO ES LA PAMPA
No darlo por perdido
Nombrar el horizonte caballadas perros
Salvajes

Lo pampeano es el objeto
Río Grande
Paysandú
Santa Rosa
Las praderas 
Las costillas del animal a las brasas

No darlo por perdido
El objeto del viaje la bordona
Guitarreadas fogones troperías
Nada 
Es lo que parece en la 
Pampa

QUINCHO PERRADA RANCHERÍO 
Quincho aripuca vendaval 
Quincho la perrada jauría los baguales 
Yeguas los ovinos carros
Plantación. 
¿La neutralidad del lenguaje? Raigambre.
Naranjas peladas de Mangini 
Cáscara la farsa pimpollitos 
tiernos.
Un parto por vez
Una patria 
un sitio con jardín 
un territorio 
una canción por vez
una partuza 
una manera de alumbrar 
cada vez
chisporroteos 
la parturienta de a una la
Alumbrada
(Polvo sin gracia chica arrabalera angurriamojarritas
O preço do feijão não cabe no poema/ 
O preço do arroz não cabe no poema.
Ferreira Gullar

LA INUTILIDAD DE LA POESÍA ES OBVIA
nadie recurre ya a los poetas
por cartas de amor o cosa semejante

por un abandono 
por nostalgia de cariño
ahora todos sintonizan el canal de los
apóstoles

la inutilidad de la poesía es evidente
ya nadie necesita esa lengua
abstrusa
desconocida
de una frontera que no es
esta

la ciudad completa
pertenece a los  días

la inutilidad de la poesía es obvia
no es útil para cambiar el cariz de las cosas
no lleva alimento a la mesa de las personas
es incapaz de regresarte esta noche a mi cama

(Dialogando con Elder Silva, 2020).

CITAS DE BAJTÍN BOURDIEU CHARTIER
insertas en el curso del poema 
¿transforman el poema en un objeto delicioso?
¿lo que cruje o la aspereza del lenguaje se torna en maravilla?
¿el poema se escribe para las chicas de Humanidades?
¿o para la que baila plena o para las egresadas de la carrera de letras o
para quienes han fundado el club de fans de la
Sonora?
¿citas de Bajtín Bourdieu Chartier embellecen estilizan el poema?
¿contrabandean lo que cruje la aspereza de lo
hablado?
lo poderoso de la métrica la rima ¿milagrosos objetos? ¿el
suburbio?
¿todo lo que tocan oro?
lo cacofónico ripioso 
la aspereza 
¿soneto
endecasílabos ripios
lo que queda? 
¿el perfume palaciego es la milonga?
¿cruje estalla bordea
bardo
la palabra cruje?
"He visto el futuro, es un crimen" 
Leonard Cohen 
“Tengo clase de religión el lunes”.

TRABAJO PRECARIO 
Marcador de pobreza
Lo negro lo pichi 
Dubček

Los rusos están aquí 
Los mencheviques no lloran beybi

¿Habrá otra vida en la que bailar Gilda en El Hacha? 
¿Otra vida en la que viajar a Migues comer tallarines caseros? 

Otra vida en el boliche de General Flores. 
Otra en la ruta a Sauce, el país del 
General.

Pobres contra pobres mi amor 
Lucen satisfechos en las
Selfies

:Todos al Centro Comercial 

Es la marca mi amor del ganado 
Es lo sabroso amor de la 
Fritanga 
Los ruidos del freír
Aceite caro

Es la góndola amor
Del Super Márquet 

Amores incorrectos
Barullentos 
Zozobrantes
Enfermos

La noticia es el tsunami 
El desbarranque

Tanquetas de carabineros en Plaza Italia
PASEO CON MI CHICA POR EL SUBSUELO DEL 
centro comercial
 
esquivamos los vehículos 
un Peugeot 
un Chevrolet del 83
un fitito azulado
 
pienso en las góndolas del 
supermercado 
en la compra del mes 
en la brótola 
lejos del puerto 
 
pienso en los mariscos y 
otros objetos alimentarios
 
el texto se despoja de sentido
 
ahora escribo en el bloc de notas 
a bordo del taxi 78
apuntes de cuando estuvimos 
con mi chica 
en el subsuelo del 
centro comercial

adherencias del texto del lenguaje de
lo hablado
 
grisura
 
textura de la lengua en los que habitan el
subsuelo del
shopping
 
hemos ido con mi chica de compras
merluza pesca del día fideos una copa de vino
 
todo tiene remedio en el centro comercial
 
las palabras conservan las marcas
vehículos que derrapan
navegaciones inciertas
cacharros objetos luminosos
 
alguna luminosidad en las cosas del
lenguaje
 
el texto se despoja de sentido

Luis Pereira Severo nació en Paso de los Toros, Uruguay,  en 1956.

Autor, entre otros, de Poemas para ser leídos en una pantalla de 5’’, Intendencia de Montevideo, 2019 (Primera mención Onetti 2019); Poemas para mi novia extranjera, milonga rioplatense,  VOX, Bahía Blanca, 2015, civiles iletrados, 2018, (Premio Nacional de Letras poesía édita 2017), Pabellón Patrio, serie de relatos íntimos (Yaugurú, 2009); Manual para seducir poetisas (civiles iletrados, 2004); Retrato de mujer azul (civiles iletrados, 1998); Poemas de acción y mujeres delgadísimas (Ediciones de Uno, 1992). 

Integra las antologías La noche amarilla. 33 + 1 voces de la poesía uruguaya actual, Círculo de poesía, 2020,  (https://circulodepoesia.com/2020/03/33-1-voces-de-la-poesia-uruguaya-actual-luis-pereira-severo),  La confabulación de las arañas (Detodoslosmares, Córdoba, Argentina, 2018), y Nada es igual después de la poesía, cincuenta poetas uruguayos del medio siglo, 1955-2005 (Centro de Difusión del Libro, MEC, 2005).

En 2022 formó parte de Calandrios, plaqueta de poesía con manuscritos en borrador editada por Yaugurú. En 2020 participó de las antologías “1956. When I´m Sixty Four” (Yaugurú), Confines, antología en tiempos de riesgo (Pixel, La Plata, Argentina), y Festín Mutante (www.festinmutante.com.ar). En 2018 integró Los hijos de Putin, Cartonerita niñabonita, Zaragoza, España.

Entre otras publicaciones en línea, una selección de textos inéditos ha sido publicada en el Periódico de Poesía de la UNAM (CDMX, México, mayo 2020). En 2018 textos suyos fueron publicados en Op.cit, http://www.opcitpoesia.com/luis-pereira-severo. En 2021 algunos poemas fueron publicados en Cuadernos del Hipogrifo de Italia, http://www.revistaelhipogrifo.com/wp-content/uploads/2022/01/104-112-1.pdf.

Desde 2005 a 2015 fue Director de Programación Cultural de la Intendencia de Maldonado, y como tal coordinador de las ferias del libro de la ciudad y de las primeras ocho ediciones del Encuentro de Escrituras (2006 – 2014).  

Otros poemas sucios, manual de castellano estándar, inédito a ser publicado en 2022 por Yaugurú, resultó finalista en 2021 del I Premio de Literatura “Casa Vacía” – Poesía 2021. 

Especialista en Gestión Cultural, (Diploma en Gestión Cultural UDELAR), maestrando Políticas Culturales CURE – UDELAR. Es parte del proyecto editorial civiles iletrados, (civilesiletrados.blogspot.com). Integra actualmente la directiva de la Casa de los Escritores del Uruguay, de la que fue fundador en 2003.

Fotos de Paola Scagliotti

Pulbicado originalmente en: http://extramurosrevista.com/luis-pereira-severo-la-ternura-del-despojo/

2 comentarios en «Acerca de la poética de Luis Pereira Severo»

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